El 10 de mayo de 2025, India y Pakistán anunciaron un acuerdo de alto el fuego con el objetivo de reducir las hostilidades en la disputada región de Cachemira. Sin embargo, pocas horas después del anuncio, se reportaron explosiones en Srinagar, la ciudad más grande de la Cachemira administrada por India. Ambos países se acusaron rápidamente de violar la nueva tregua, culpándose mutuamente por la reanudación de la violencia. Según informes, los ataques con drones continuaron en la región incluso después de la declaración del alto el fuego. Cachemira ha sido durante mucho tiempo un punto de conflicto entre India y Pakistán, quienes reclaman la totalidad del territorio pero administran partes separadas. Los acuerdos de alto el fuego entre ambos países han sido históricamente frágiles, con frecuentes acusaciones de violaciones. De acuerdo con expertos citados por DW, el hecho de que tanto India como Pakistán reclamen públicamente la victoria en el último alto el fuego podría, paradójicamente, ayudar a estabilizar la crisis, ya que permite a ambos gobiernos presentar el resultado como un éxito ante sus respectivas audiencias nacionales. La situación sigue siendo tensa y no está claro si el alto el fuego se mantendrá en los próximos días.