En junio de 2024, el ejército ucraniano reportó un ataque a un autobús civil en la región de Sumy, en el noreste de Ucrania. Según las autoridades, el ataque dejó nueve muertos y cuatro heridos. Ihor Tkachenko, jefe de la administración militar de Sumy, indicó que personal médico y equipos de emergencia fueron enviados al lugar para asistir a las víctimas. El incidente tuvo lugar pocas horas después de que Rusia y Ucrania mantuvieran sus primeras conversaciones de paz directas en tres años, un hecho que ha captado la atención internacional. Desde el inicio del conflicto a gran escala entre Rusia y Ucrania en febrero de 2022, la región de Sumy ha sido escenario de hostilidades que han afectado a la infraestructura civil y al transporte. Las autoridades ucranianas atribuyen el ataque a fuerzas rusas, aunque aún no hay verificación independiente de los detalles. El suceso resalta los riesgos continuos para la población civil en zonas de conflicto, incluso mientras se desarrollan esfuerzos diplomáticos.