China ha invertido aproximadamente 70.000 millones de dólares en Pakistán como parte del Corredor Económico China-Pakistán (CPEC), un componente clave de la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI). A pesar de las dudas sobre la viabilidad económica a largo plazo de estas inversiones, China continúa apoyando el CPEC. Una de las razones de este compromiso es la fuerte oposición de la India al proyecto, ya que el CPEC atraviesa territorios en disputa reclamados tanto por India como por Pakistán. El actual alto el fuego entre India y Pakistán ha renovado el interés en la estrategia regional de China. Mientras mantiene sus inversiones en Pakistán, China también busca desarrollar relaciones comerciales con la India. El reciente encuentro entre el primer ministro indio, Narendra Modi, y el presidente chino, Xi Jinping, pone de relieve el diálogo diplomático en curso entre ambos países. Además, el desarrollo del Corredor Económico India-Medio Oriente-Europa (IMEC) representa una posible ruta comercial alternativa que podría competir con el CPEC. Estas dinámicas reflejan la competencia estratégica más amplia en Asia Meridional, donde las inversiones en infraestructura están estrechamente vinculadas a los intereses geopolíticos.